Los fenicios adoraban a Baalat, reina de Chipre. Ella se había enamorado de Tammuz (Adonai), hijo de Crusor, rey de los fenicios, y había abandonado su propio reino para habitar en Chipre, fortaleza de los fenicios, sometiendo al mismo tiempo a todos los chipriotas el rey de Biblos.
Amó a Ares antes que a Tammuz. Cometió adulterio con este último y su esposo Hefaisto (Chusor), que la había sorprendido y estaba celoso de ella, mató a Tammuz en la montaña del Líbano, cuando estaba a punto de matar al jabalí. A continuación, Baalat se quedó en Biblos y murió en Afqa, donde está enterrado Tammuz.
Fuente: "Dioses, mitos y rituales de los semitas occidentales en la antigüedad" de José María Blázquez
Amó a Ares antes que a Tammuz. Cometió adulterio con este último y su esposo Hefaisto (Chusor), que la había sorprendido y estaba celoso de ella, mató a Tammuz en la montaña del Líbano, cuando estaba a punto de matar al jabalí. A continuación, Baalat se quedó en Biblos y murió en Afqa, donde está enterrado Tammuz.
Fuente: "Dioses, mitos y rituales de los semitas occidentales en la antigüedad" de José María Blázquez
No hay comentarios:
Publicar un comentario